La Transformación Digital no puede ser sino humana y sostenible. Humana porque es una transformación que no puede entenderse sin involucrar a las personas, el activo más importante de la empresa. Sostenible porque la digitalización no puede abandonar el compromiso con el entorno que nos rodea. A lo largo de este año, desde INCIPY hemos organizado diferentes eventos y webinars que han reforzado esta afirmación. En esta ocasión y como recopilación de ideas, queremos ofrecerte algunas claves acerca de cómo impulsar una Transformación Digital Humana y Sostenible.
1. Con una visión horizontal
La transformación digital debe hacerse desde y para las personas. La tecnología es un impulsor del cambio, es un facilitador, pero precisa sí o sí del factor humano. Las innovaciones y tecnologías emergentes nos hacen plantearnos nuevas formas de hacer las cosas, de resolver problemas y suponen el desarrollo de nuevas habilidades. Por eso, la transformación digital implica necesariamente un cambio de mindset a la vez que cultural. En la búsqueda de nuevas oportunidades y desempeño en otros escenarios, es importante que las organizaciones sean colaborativas y abiertas. En definitiva, es necesaria una visión más horizontal y trabajar por unos valores y una cultura alineada.
2. Con espacios colaborativos
El contexto actual ha acelerado la necesidad de que las organizaciones sean más innovadoras y que no se queden atrás en lo que respecta a las políticas de flexibilidad. Los formatos híbridos suponen espacios de trabajo más eficientes, flexibles y más colaborativos. De eso se trata, de poder compartir y que todo resulte más sencillo.
3. Poniendo al empleado y al cliente en el centro
¿Cómo conseguir que un equipo esté unido y motivado? Con una propuesta de valor al empleado (PVE) que sea atractiva, sembrando el orgullo de pertenencia. Esta propuesta de valor solo puede hacerse partiendo de la escucha activa para comprender sus necesidades y aspiraciones. Solo poniendo al empleado en el centro, este se sentirá parte de un equipo y tendrá ganas de remar hacia un propósito común con el resto de la organización. En otras palabras, hay que crear una cultura donde a las personas les apetezca quedarse.
Cualquier organización del sXXI debe incluir en su ADN, al cliente (stakeholders). Una organización Customer Centric es capaz de aportar valor de manera permanente, de mejorar su experiencia incorporando la tecnología para mejorarla continuamente. La responsabilidad del cliente no es de ventas y de Atención al Cliente ni de los equipos front office, es de toda la organización.
4. Con hábitos sostenibles
La transformación cultural que mencionábamos debe incluir el cambio de hábitos a otros más sostenibles. Ser respetuoso con el medioambiente ya no es algo exclusivo del área de Responsabilidad Social Corporativa, es un asunto de todos. Hoy más que nunca la sociedad, la ecología y la economía son tres conceptos que no pueden separarse. De lo que se trata es de alcanzar la sostenibilidad económico-financiera mediante planes de acción ligados a métricas. ¿Cuáles? A través de la reducción de la huella de carbono, de la apuesta por las energías renovables, de la diversidad y del empleo de la tecnología para digitalizar procesos y así ahorrar costes. Y sobre todo de la igualdad de nuestra sociedad.
5. Con el respaldo del equipo directivo
La transformación cultural y digital requieren del apoyo y respaldo financiero del equipo de Dirección. El compromiso debe ser de todos, pero sobre todo de los altos mandos. Para que esta nueva mentalidad prospere y realmente cale en todos los departamentos debe formar parte de un proyecto estratégico.