Los clientes son cada vez más exigentes con los productos, los servicios y con las propias compañías, demandando a su vez inmediatez en el consumo de dichos productos / servicios. Como hemos expuesto en anteriores post, hemos pasado de un Entorno Complicado a un Entorno Complejo, de un Entorno más Predecible a uno que lo es menos. Y así con diferentes aspectos:
Entorno Complicado <-> Entorno Complejo
Más Predecible <-> Menos Predecible
Beneficio <-> Propósito
Jerarquías <-> Redes
Control <-> Empoderamiento
Planificación <-> Experimentación
Privacidad <-> Transparencia
Muchas organizaciones establecen dimensiones o palancas sobre las que actuar para que una empresa actúe para ser considerada ágil, siendo algunas de estas dimensiones la Estrategia de la misma, su Estructura, sus Procesos, las Personas y la Tecnología. Todas ellas conectadas y en las cuales se deben aplicar mejoras que doten a la organización de una flexibilidad y capacidad de adaptación a los entornos cambiantes.
Pero debemos tener claro, que aunque actualmente la tecnología es la palanca sobre la que se construye todo, sufriendo importantes variaciones en periodos muy cortos de tiempo, y obligando a las empresas ya no sólo a mirar a los competidores tradicionales, la Era Digital no es sólo tecnología, y las dimensiones menos tecnológicas y las soft skills cobran especial relevancia. En especial si no queremos vernos sorprendidos por empresas de nueva creación, que de una forma rápida, ágil y con mejor aprovechamiento, aparentemente de los recursos de los disponen, y con una propuesta de valor atractiva, convertirse en serias amenazas.
Muchas organizaciones caen en el error de creerse Organizaciones ágiles por el mero hecho de Implementar estas metodologías en un proyecto y/o departamento, manteniendo el resto de la organización inamovibles.
La Transformación debe de ser más profunda y afectar a la totalidad de la organización.
Hasta ahora, las organizaciones se centraban en grandes implementaciones tecnológicas, pensando que el disponer de la «mejor o más cara» herramienta les iba a permitir ser más ágiles en su día a día, sin tener en cuenta factores culturales e internos de la propia organización. Gran equivocación, ya que las herramientas son el soporte al método, y no a la inversa.
En las organizaciones ágiles, lo importante es el destino, no el viaje.
Y conviene prestar atención a la cultura de las organizaciones, a sus equipos, a las personas, a los procesos, y sólo en último lugar a las herramientas que implementamos, ya que, si decidimos el camino inverso y priorizamos la herramienta, el porcentaje de fracaso será muy elevado.
En los últimos años se están conociendo organizaciones que se basan en nuevas formas de trabajar, más ágiles, cuyo foco son las personas, el planeta y también el beneficio de las mismas, en base a poner al cliente en el centro. Pero otras muchas empresas, van un paso más allá, poniendo como foco el Propósito que las mueve, mucho más aspiracional y retador que las tradicionales misión y visión de las organizaciones, donde ponen a las personas en el centro para conseguirlo, y para ello se “Organizan y Trabajan” bajo nuevas corrientes como Holacracy, donde las estructuras son planas, flexibles, no existen los jefes, etc.
Este enfoque de hacer las organizaciones más humanas no es nuevo, aunque gran parte de lo que escuchemos provenga de las Empresas Digitales de reciente creación y las nuevas Startups. Esto se debe a que ellas han nacido bajo el condicionante de Entorno VUCA y son conscientes de que la mejor forma de responder y hacerle frente es adoptando estas nuevas formas de trabajar.
El hecho de hacer las organizaciones más humanas, reporta mayores beneficios a la empresa, ya que esta deja de ver a los trabajadores como empleados, y sí como colaboradores o asociados, generando mayor sensación de pertenencia y compromiso por parte de estos.
Esto queda patente en el estudio realizado por Gallup, donde únicamente el 13% de los empleados están comprometidos con sus puestos de trabajo a nivel mundial. Esto nos viene a decir que el 87% no lo está, lo que produce altos niveles de absentismo, mejor implicación, baja productividad, etc.
(Gallup)
Si a esta falta de compromiso, le añadimos que no todos los empleados están en posesión de las competencias y conocimientos necesarios para la Era Digital, la situación de las organizaciones se complica. Y no sólo para conservar el talento que poseen, sino el ser atractivas para la captación de nuevo, donde empresas tradicionales resultan poco atractivas. Importante es el hecho de que se verán en la necesidad de atraerlo, incluso perfiles que todavía no existen, debido a la velocidad de cambio en todos los sectores.
Y esta supervivencia cada vez está menos asegurada, independientemente del tamaño y la industria de nuestra organización, de ahí la importancia de la Transformación.
En este Ecosistema, desde Íncipy ayudamos a las Organizaciones Acelerando su Business Agility y adaptarse a los cambios sin comprometer la calidad de sus productos y servicios, y buscando mantener una ventaja competitiva aportando valor a los clientes.